Por CamiloPsico
Esta pintura puede recordarte a la famosa Mona Lisa de Leonardo da Vinci. Pero el artista pintó Ginevra de’ Benci más de 20 años antes.
Descubra por qué este primer experimento fue revolucionario en la historia de la pintura.
Leonardo tenía veintitantos años cuando creó este retrato, ahora en la colección de la Galería Nacional de Arte.
El genio en ciernes acababa de comenzar a experimentar con un nuevo medio: la pintura al óleo
Mire más de cerca para ver con qué delicadeza pintó. Ginebra, Su rostro está modelado con capas de sombras que se profundizan gradualmente. Leonardo no utilizó líneas ni transiciones abruptas de color y luz.
Uno de los contemporáneos del artista escribió que él la pintó “con tal perfección que parecía no ser un retrato sino la propia Ginevra”.
La pose de Ginevra fue otra innovación. Se la muestra en una pose de tres cuartos, a medio camino entre una vista de perfil y una vista frontal.
Este es uno de los primeros retratos en vista de tres cuartos realizados en Italia.
Leonardo utilizó una técnica llamada salto para transferir su dibujo de Ginevra a un panel de madera
Hizo agujeros siguiendo las líneas del dibujo y luego lo colocó sobre el panel. Luego, Leonardo frotó tiza negra a través de los agujeros de la madera.
En estas imágenes infrarrojas de Ginevra de’ Benci podemos ver los puntos del ataque. Las imágenes de reflectografía infrarroja utilizan cámaras especiales para revelar el material debajo de las capas de pintura (ver imagen)
El escenario del retrato de Ginevra fue una innovación del joven Leonardo.
En aquella época, las mujeres casi siempre aparecían retratadas en el interior, y los paisajes sólo se vislumbraban a través de las ventanas abiertas.
En cambio, Leonardo dejó a Ginevra al aire libre.
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